Ningún cabo suelto

AYER AVISÓ el Sindicato Único de Trabajadores Administrativos y de Intendencia de la Universidad Autónoma de Campeche (SUTAISUAC), que la fecha fatal será el próximo 28 de abril para estallar la huelga, como ocurrió el año pasado.

Aseguran que la UAC no ha cumplido con los convenios, entre estos los de otorgarles plazas, pues se sigue contratando a personal sin tomarlos en cuenta y exigen también la “retabulación” salarial. Lo que “encendió” a la lideresa Claudia Eunice Escobedo Pech, es la presunta injerencia sindical con la intención de armar un nuevo sindicato conformado por personal que fue expulsado o renunciaron a su agrupación.

Identificó a un colaborador cercano del rector José Alberto Abud Flores por estar promoviendo la nueva organización: “Respondiendo a su pregunta, ¿tiene nombre?, no le podemos poner nombre, porque yo siempre he dicho que tengo que tener las pruebas, pero si le voy a decir algo. Si yo soy directora o administro un lugar, la gente responsable a mi alrededor tiene que cuidarme las espaldas, porque es mi gente y sus actos van a repercutir en mi…hoy les digo, lo que si tengo la prueba es que el chofer particular del señor Abud es el que está regando por WhatsApp la asociación para que la gente vaya y se afilie”.

Aseguró que el SUTAISUAC tiene 500 afiliados y la nueva asociación, denominada Sindicato Unido de Trabajadores Administrativos y Manuales de la Universidad Autónoma de Campeche, es minoritaria al contar con 35 trabajadores, encabezados por su secretaria general Erika Miss.

Hasta el momento la huelga que se anuncia solo sería de los administrativos y todavía no entraría el Sindicato Académico que dirige Joaquín Berzunza, a diferencia de la anterior donde si sumaron fuerzas. Pero podría ser cuestión de tiempo, pues se sabe que tampoco están satisfechos con el cumplimiento de su pliego petitorio y la relación con el rector es mala y prácticamente no tienen comunicación.

No hay que perder de vista lo que pase en las próximas semanas en nuestra máxima casa de estudios. Ahí están también las manifestaciones que hicieron durante el carnaval pronunciándose contra el rector los alumnos pertenecientes a una resucitada Federación Estudiantil, que no está reconocida por la Universidad, pero cuenta con el apoyo del Gobierno estatal.

Son muchos los frentes abiertos con la mirada puesta en el destino de la UAC, que seguramente no le harán la vida fácil a Abud en el último año de su periodo que concluye en 2026.

¿Se quedará hasta el final, seguirá manteniendo el control del Consejo Universitario o cederá ante los movimientos que vienen, que sin duda van a agitar más las aguas en la UACAM? Lo que sea que ocurra ojalá no vuelva a afectar seriamente las clases para miles de alumnos, como ocurrió con la huelga en su edición del 2024.