Ningún cabo suelto

EN ESCÁRCEGA, apenas van saliendo del desgobierno que dejó el expresidente cuya fortuna creció como la yerba “Silvestre”, gracias a que supo aprovechar la alcaldía para promoverse como constructor preferido del Tren Maya en la región, y ya empezaron a ver los primeros signos de que el Ayuntamiento con Juan Carlos Hernández Rath no va a mejorar mucho.

Y eso que en su campaña prometía todo; por ejemplo, cuando les daba a los habitantes en las comunidades su celular para que le marcaran “las 24 horas” y que les contestaría para resolver sus problemas. Como era de esperarse ya una vez instalado en el cargo, ahora el teléfono suena y suena y nadie les contesta, porque aquella promesa quedó en pura lengua.

Pero además lo acusan de que se quiere pasar de vivo, por ejemplo: como se le echó a perder por falta de mantenimiento el recolector de basura de la presidencia municipal, donado desde la época del Gobierno de Carlos Miguel Aysa,  Rath le pidió a una de las presidencias de las juntas municipales que les entregue su camión para que hagan el trabajo, pero sin pagarle renta ni firmarle nada, con el argumento de hacerlo como un aporte al movimiento político de MORENA al que pertenecen también esas nuevas autoridades.

¿En realidad no tendrá su gobierno recursos para reparar algo que es de primera necesidad para los servicios públicos en la cabecera del Municipio? ¿De verdad le habrá dejado tan vacías las arcas su antecesor, o solo se quiere pasar de listo jineteando el presupuesto?

Por lo pronto el presidente municipal debe dejar de pasear tanto en la capital de Campeche, donde se la pasa en la grilla y ponerle atención a mejorar los servicios que le exige la ciudadanía. Después de la desastrosa administración pasada que resultó una calamidad para los escarceguenses, hay quienes ya están pensando que el cambio no está pintando nada bien.