Escrito por NCS Diario el noviembre 8, 2024
Así las cosas…
A quien corresponda…
Recorres la ciudad de San Francisco de Campeche y no resulta agradable a los sentidos las condiciones en las que se encuentra. Se han dejado caer sitios emblemáticos, inmuebles históricos y la gran mayoría de las calles están en pésimo estado. Lo poco que estaba en buenas condiciones se está destruyendo. Es lamentable y triste.
No hay amor por esta tierra, hay sí mucha ambición de poder, de obtenerlo, no para servir, sí para servirse, para librarse de apuros económicos y presumir que se está a otro nivel, aunque como funcionarios no estén cumpliendo con los compromisos que adquirieron, aunque estemos retrocediendo, transitando de reversa.
Y lo peor es que no quieren ver, no quieren asentarse en la realidad y cada que aparecen en público o en las redes sociales, es para decir mentiras, hablar de una labor que no se ve; de servicios públicos, que dejan mucho que desear aunque estén concesionados y de frivolidades que no tienen ningún beneficio para los ciudadanos.
Los funcionarios municipales están preocupados por la imagen personal, por verse bien, por ponerse el mejor disfraz sea para estar ad hoc a este mes de los muertos, para las festividades decembrinas o las carnestolendas, aunque el Municipio se esté cayendo a pedazos. Claro ellos tienen otros datos y su realidad propia, muy distante de los hechos.
Calles y alcantarillas rotas en los barrios tradicionales de esta ciudad histórica, que no por ello debemos regresar a la terracería; la Plazuela y el Parque de San Francisco en el más completo de los abandonos, como también lo está su reloj y los relojes del Parque Campeche, que años atrás los mirábamos con orgullo quienes aquí vivimos, pero también los visitantes que se tomaban la foto.
La Fuente Danzarina de la calle 8, que en el pasado reciente reunió a las familias que gustaban observar cómo los chorros de agua se armonizaban con la música y las voces de cantantes campechanos, está llena de verdín y basura. La Maqueta del Centro Histórico es una pena. Por si fuera poco se ha permitido el asentamiento de toldos y carritos de vendedores ambulantes que afean el lienzo amurallado de ambos lados. Ni en eso hay capacidad para ordenarlos, para que no bloqueen los atractivos.
Las fuentes de la Electrificación, del Progreso y la del Barquito en San Francisco ya las sepultaron, tiene años que no funcionan y se ve muy lejos que lo hagan de nuevo en esta administración, por el desinterés plenamente demostrado. A las que les ha ido bien, como las dos últimas, les ha tocado pintura. A la primera que está frente a los Cocteleros cada día es mayor su deterioro. Pensé que con la remodelación del estadio “Nelson Barrera” y la construcción de la Escuela de Béisbol la iban a rescatar como un plus, pero nada.
El Parque Campeche por donde diario circulan centenares de personas está en condiciones deprimentes, sobre todo en la parte de las canchas que era un buen centro de reunión, deporte y entretenimiento para los jóvenes.
Estamos peor que antes, aunque digan lo contrario, pretendan engañarnos con discursos triunfalistas y lejanos de la realidad.
Vamos para atrás.