Histórica huelga en la UAC

Por primera vez desde que fue creado, el Sindicato de Personal Académico, junto con el de Trabajadores Administrativos y de Intendencia, colgaron las banderas rojinegras en las escuelas y facultades de la Universidad Autónoma de Campeche.

Por lo que se ha informado desde el año pasado y lo declarado en semanas recientes ante la prensa, la rectoría que encabeza José Alberto Abud Flores está lejos de llegar a un acuerdo con las organizaciones sindicales que encabezan, por los docentes, Joaquín Berzunza Valladares y en representación de los burócratas universitarios, Claudia Escobedo Pech.

En el caso del SUPAUAC, el sindicato de los maestros y maestras universitarias, las negociaciones previas con la Universidad no prosperaron ni mínimamente y como lo reconocía la juez en el Juzgado Laboral el pasado 19 de marzo en la audiencia de conciliación, al no presentar la UAC una propuesta al Sindicato ni estar en disposición de cumplir sus requerimientos, prácticamente todo lo relativo a los incrementos salariales y el análisis de las cláusulas del Contrato Colectivo de Trabajo quedó a debate de las partes.

Ha sido un proceso de varios meses que inició en octubre del año pasado. Casi medio año en el que prácticamente no se lograron avances en las propuestas y no se ve como, en el corto plazo, pudiera darse un giro de 180 grados para sacar de esta crisis a la Máxima Casa de Estudios.

Las afectaciones ahora las tendrán los miles de alumnos matriculados que se preparan en sus aulas y también los cientos de trabajadores de la academia y de la administración, que durante este tiempo de suspensión de actividades no percibirán ingresos.

En su segundo intento al frente de la Universidad, el rector José Alberto Abud Flores vuelve a pasar a la historia. Ahora como el primero en su cargo al que le estallan una huelga sindical.

A partir de este momento, lo que sea que tarden en lograr un arreglo, que ojalá sea pronto, ojalá valga la pena para que las cosas cambien, el trato y los posicionamientos de todos los involucrados al interior de la institución se modifique. Se hagan a un lado los egos, las visceralidades, se acaben los desplantes, el ventajismo y el revanchismo, las altanerías y también los intereses externos de todo tipo. Porque así nadie gana.

El DOMINGO ARRANCAN LAS CAMPAÑAS LOCALES

Pero el interés político está centrado desde un día antes, el próximo sábado 13 de abril, en la marcha pacífica a la que convocaron las y los policías de Campeche, que ya van para un mes manifestándose pidiendo la destitución de la secretaria Marcela Muñoz Martínez y todos los altos mandos de la corporación, a quienes responsabilizan del fallido operativo del CERESO de Kobén del 15 de marzo.

No hay que ser sabio para darse cuenta que a la oposición le cayó la fecha como anillo al dedo, solo unas horas antes de que se dé el banderazo de salida para sus candidatas y candidatos a diputados locales y a las presidencias municipales. Y sería todo lo contrario para Morena y sus candidatos, en caso de que crezca el número de campechanos que demuestren su respaldo a los policías, que hay que reconocer han salido por miles en las dos marchas anteriores y podrían superarlos en esta tercera, lo que representa votos que serían prácticamente imposibles de recuperar para los candidatos y candidatas morenistas.

Hasta el momento la gran mayoría de los elementos se mantienen firmes en las instalaciones de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana. Sin embargo, ayer la gobernadora Layda Sansores San Román indicó que ya son 489 los policías que están operando desde la sede temporal de la academia. Y arremetió otra vez contra el PRI y Movimiento Ciudadano, a quienes señala de estar detrás del conflicto y las marchas.

Con este escenario arrancarán las campañas.

ADENDA

El debate presidencial del domingo pasado logró otra vez captar la atención de millones de mexicanos en los medios de comunicación y en las redes sociales. Fue evidente por las tendencias y los comentarios que inundaron Internet. Sobre todo en este aspecto radica su principal utilidad desde que existen los debates a la Presidencia, en el interés que generan para que muchos nos dediquemos durante dos horas a analizar lo que proyectan las candidatas y candidatos de los partidos y coaliciones, en su imagen, en sus intervenciones con sus propuestas y también en la forma en que son capaces de lanzar duros cuestionamientos a sus adversarios y responder a los que también les lanzan a ellos o ellas.

Es un aspecto en el que la ciudadanía mexicana ha sido constante y ha crecido con la democracia. Sin embargo, hay que decir que los organizadores de estos debates no han estado al nivel de la atención que le prestan los ciudadanos. Les hace falta mucho a nivel de producción y para lograr que se desarrollen mejor, que se profundice en los temas y que se tenga de verdad una discusión de alto nivel e informada de los participantes. Eso hay que subrayarlo no es culpa de los ciudadanos, sino de los responsables de concebir los debates así, acartonados, superficiales y donde difícilmente se puede tener a un ganador o ganadora claro que despunte en las preferencias o logre convencer y sorprender a un electorado que va muchos pasos adelante.