Escrito por NCS Diario el agosto 4, 2022
Nacional
Carbonera colapsada, sin afiliación a la Cámara Minera Mexicana
Continúan labores de rescate tras más de 30 horas del siniestro
Durango, Dgo. La mina de carbón ubicada en Sabinas, Coahuila, donde están atrapados 10 mineros no forma parte de la Cámara Minera Mexicana y no se tienen datos ni de sus dueños, ni de sus protocolos de seguridad, dijo Jaime Gutiérrez, presidente de esta asociación.
La carbonera, denominada Pinabete, se encuentra en la zona centro-norte del estado de Coahuila y se inundó la tarde de ayer tras un derrumbe, del cual sólo pudieron salir cuatro trabajadores que fueron hospitalizados y uno más que resultó ileso.
Pinabete se localiza en la población de Villa de Agujita, del ejido El Mezquite, en un paraje denominado Las Adjuntas, donde se unen los ríos Álamo y Sabinas, cerca de las minas La Nacional y Las Conchas, que están fuera de operación desde hace décadas.
Sobre el incidente, el dirigente minero lamentó lo sucedido, pero dejó en claro que ellos como cámara minera no tienen los datos precisos de lo que sucedió ni cómo.
“Esta pequeña unidad minera no está afiliada a la cámara, ni sus dueños, no sabemos los protocolos de seguridad, ni el tipo de seguridad que usaban”, reiteró Jaime Gutiérrez.
Sin embargo, a pesar de no estar afiliada, los agremiados a esta organización, que se encuentran cerca de la zona donde ocurrió el accidente, han enviado apoyo con cuadrillas de rescate.
Labores de rescate continúan tras más de 30 horas del siniestro
A más de 30 horas del siniestro, familiares de los 10 trabajadores atrapados en la mina de carbón de la Agujita, en la localidad de Sabinas, Coahuila, apelan a la experiencia de los mineros, que son sus hijos, esposos, o hermanos, para que salgan con vida.
El cuarto de siglo que lleva Margarito excavando las entrañas de la tierra no puede fallarle, dice su esposa María, quien no se ha movido de la mina.
En las labores de rescate de los mineros participan 269 efectivos de los 3 órdenes de gobierno, federal, estatal y municipal.
La impaciencia es mucha y algunos familiares dicen que los rescatistas marchan a paso lento y el agua que inundó la mina, lejos de bajar, aumenta de nivel.
De la empresa concesionaria de la mina nada se sabe, ni las autoridades de Coahuila se atreven a mencionarla. Lo único cierto es su abandono.